Aspecto nutricional

Todas las carnes nos brindan un excelente aporte proteico y son fuente de minerales y vitaminas importantes para la salud humana. 

La principal variante que nos aparece ante distintas carnes es su porcentaje de grasa, pero a diferencia de lo que piensa la mayoría de la gente esa variación se da con mas importancia dentro de los cortes de una misma espacie de carne que entre las diferentes especies.

Es un error afirmar que la carne de tal o cual especie tiene más grasa que otra, porque todo depende del corte elegido. Si comparamos el corte mas magro de una contra el más graso de otra, es evidente el resultado.

Además influye mucho la preparación; no es lo mismo un muslo de  pollo con o sin piel o un caree de cerdo con o sin la grasa de cobertura que lo caracteriza. Por eso no hay que generalizar y lo correcto es evaluar cada corte por separado en referencia al tenor graso.

Si su opción es comer carne con bajo tenor graso lo recomendable es sacarle la piel al pollo y la cobertura de grasa al cerdo, ya que estas carnes se caracterizan por tener poca grasa infiltrada dentro del músculo y al sacarle la grasa que los rodea o recubre estamos extrayendo cerca del 80 % de este elemento en el corte de carne elegido.

El método de cocción es otro de los aspectos que modifica los componentes nutricionales de las carnes. Los fritados y salteados incorporan grasas.

Los métodos recomendables son: parrilla, horno, plancha, hervido y vapor. En estos no solo no se incorpora grasa, sino que estamos bajando el contenido graso que la carne posee normalmente.