Principales indicadores del sector cárnico

En la jornada anual del Instituto Nacional de Carnes- Cierres y Perspectivas 2025- se dieron a conocer las estadísticas del sector cárnico con su proyección por parte del gerente de Información Jorge Acosta
Los ingresos por exportaciones alcanzan nuevamente niveles máximos históricos, con una distribución equilibrada entre los principales mercados de destino. Se estima que los ingresos totales por exportaciones del sector cárnico en 2025 rondarán los 3.328 millones de USD, 4% superior al alcanzado en el 2022.
El mercado de China, si bien en los últimos años ha mostrado una caída significativa en sus ingresos, cerrará 2025 con un leve repunte respecto a 2024, alcanzando 971 millones de USD, un 18% más, lo que representa 29% del total exportado. En sentido contrario y en constante ascenso, se encuentra el mercado del USMCA (EE. UU., México y Canadá), que cerrará el 2025 con un valor récord, aproximadamente 38% superior al de 2024, al ubicarse en torno a los 1.000 millones de USD. Con ello, se posiciona como el principal destino de exportación, con una participación de 30% del total.
También destaca el desempeño del mercado de la Unión Europea, cuya demanda crecería 81% respecto al año anterior, alcanzando un valor cercano a 700 millones de USD al cierre del año.
La carne bovina muestra en 2025 un volumen de colocación 11% superior al 2024 y la valorización promedio (IMEx-Ingreso Medio de Exportación) más alta de los últimos 10 años.
Se alcanzarían unas 548 mil toneladas epc exportadas con un valor promedio del entorno de los 5000 USD/ton pc, representando un ingreso total de la carne bovina del entorno de los 2,7 mil millones de USD.
El consumo de la carne bovina en Uruguay lidera el crecimiento, con un incremento de 2,6% en el volumen comercializado. Este aumento está impulsado por la mayor colocación de carne importada (+16,0%), mientras que la de origen nacional registró una disminución de 2,1%. La carne aviar se consolida como la segunda proteína más consumida, con un crecimiento moderado.
Para el 2025, se proyecta un consumo total de 100,5 kg por habitante, lo que implica un aumento de 1,2 kg respecto a 2024 y constituye el nivel más alto registrado en la última década.